Los espacios ya están en funcionamiento y forman parte del paquete de estrictas medidas sanitarias aplicadas en la zona de obras de las cinco torres, cuya construcción es emprendida por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), en el marco del Plan Maestro de Reconversión del Puerto de Asunción. Fueron construidos por la empresa contratista de la obra, el Consorcio TBI (Tecnoedil SA, Alberto Barrail e Hijos SA e Itasa SA), y se hallan adaptados a las necesidades de los trabajadores de la obra, cuya salud y la de sus familiares se busca salvaguardar, en tanto dure la pandemia.
Con la instalación de estos espacios de esterilización, en Oficinas de Gobierno (ODG) continúa el proceso de intensificación del protocolo de prevención de la expansión de la enfermedad del coronavirus, en cumplimiento del Decreto presidencial N° 3525, que amplía el aislamiento preventivo general, exceptuando a las personas que trabajan en obras públicas.
Carol Benítez, asistente de la Dirección de Obras del consorcio TBI, manifestó que la idea de construir sus propias cabinas surgió luego de notar la escasez de cabinas de ese tipo en plaza, debido a la gran demanda del mercado; así como a la imperiosa necesidad de utilización de las mismas en la obra, donde trabajan más de 700 personas que requieren de un sistema rápido y seguro de desinfección.
“Este es un emprendimiento 100 % de fabricación nuestra y en el que, para su realización, nos involucramos todos, desde plomeros y electricistas hasta directivos. Estamos muy contentos de que este proyecto sea una realidad y poder brindar mayor protección a nuestros trabajadores”, expresó Benítez.
Las cabinas ya se encuentran en funcionamiento. Una de ellas está ubicada en el acceso peatonal de la entrada principal y otra, en el acceso a la zona de obras. Asimismo, se prevé la instalación de un arco en la entrada vehicular para desinfectar los vehículos que ingresen a la zona.
Cada cubículo cuenta con un tanque de 60 litros de agua con una solución de alcohol al 70 % y seis picos aspersores, manejados con una válvula mecánica. El objetivo es agilizar el ingreso de los trabajadores a la zona de obras, evitando su aglomeración innecesaria.
Por otra parte, se aplica un estricto protocolo sanitario, cuyas normas obligan a la limpieza de herramientas, el uso de tapabocas y guantes, la disposición de lavamanos en áreas comunes, fumigaciones constantes, toma de temperatura, cambio de vestimenta y pulverizaciones en áreas internas y escaleras.
“Fue genial cómo todo un consorcio aportó ideas y concretó este proyecto; fue un esfuerzo de parte de todos, con el objetivo de brindar tranquilidad, mientras seguimos llevando el pan a nuestras casas”, agregó Karen Pavón, técnica de seguridad industrial del Consorcio TBI.
